jueves, 6 de febrero de 2014

Sin disculpa, ni perdón.

Lo siento, 
pero. 

Sólo corro 

detrás de lo quiero 
y no siempre me divierte. 

Huir, 

eso sí. 
Siempre se me ha dado. 

No he sido buena estudiante, 

pero tengo buena memoria. 
Ojalá peor. 
Olvidar más fácil, 
recomenzar, 
reconstruirme. 

No soy perfecta 

en nada, 
ni en nadie. 
Ni pretendo serlo. 

Beso 

cada uno 
de mis errores 
porque les duele más 
a ellos serlo, 
que a mi 
haberlos cometido. 

No dejo ir 

ni siquiera 
aquello que no necesito. 

La inseguridad 
la desconfianza 
viajan conmigo, 
al fin 
y al cabo 
son mías. 
Completamente mías. 

No es fácil quererme. 
Lo sé 
porque a veces 
a mí 
también me resulta más fácil 
no hacerlo. 

Que no suene 
a disculpa 
ninguno de estos versos. 

Quizá,
lo siento, 
pero.